Tablas Náuticas, Tablas Útiles al Navegante, Tablas de Navegación y Tablas del Navegante

09/11/2006
La mayoría de los aspirantes a un título náutico tanto profesional como de recreo han nacido en la era de las calculadoras y ordenadores y se sorprenden cuando se les dice que a un examen de cálculos pueden llevar unas «tablas náuticas». Pues bien, durante siglos y hasta hace unos 25 años, el uso de «tablas náuticas» era la única forma de resolver en la mar los complejos cálculos matemáticos de la estima o las observaciones de astros para conocer la situación.

Las «tablas» recogen en forma de matriz los resultados de fórmulas trigonométricas más o menos complejas para todos los posibles datos de entrada con la precisión adecuada al cálculo que se pretende. Debido a la importancia de las tablas para la obtención de la situación, de siempre las Armadas promovieron el desarrollo y elaboración de las mismas para su uso fácil por los navegantes. En España podemos estar orgullosos de que fuera un español, el Capitán de Fragata D. José Mendoza Ríos quien, tras ganar un concurso del Almirantazgo Británico; elaborara las famosas «Tablas de Mendoza» con las que navegaron durante el siglo XIX y parte del XX los navegantes occidentales.

Hoy en día la utilización extensa de calculadoras y ordenadores han disminuido el uso de las tablas pero no lo han eliminado; la tabla puede llegar a ser en algún caso la «tabla de salvación» para obtener una situación cuando las pilas de la calculadora se han descargado. Por otra parte, a determinados aspirantes a una titulación de recreo que son de «letras» les puede resultar más sencillo utilizar las tablas que adentrarse en el manejo de las funciones trigonométricas de una calculadora.

Las colecciones más importantes de tablas de uso náutico empleadas en los últimos tiempos son:

Tablas Náuticas de Graíño y otros
Tablas Útiles al Navegante de Barbudo-García de Paredes
Tablas de Navegación de Martínez Jiménez
Tablas del Navegante de Ignacio Barbudo


Cualesquiera de estas colecciones citadas, alguna de las cuales no se encuentra ya en el mercado, resuelven las fórmulas normales de la navegación (estima, funciones trigonométricas, ángulo en el Polo, etc.) y, como no podría ser de otra manera, sus resultados son idénticos con parecida precisión para las necesidades del navegante.

En nuestra sección Anuarios y Tablas disponemos de alguna de estas colecciones; otras como las Tablas Náuticas están descatalogadas lo que presenta cierto problema para el alumno de enseñanzas náuticas ya que algunos de los libros de texto sobre astronomía náutica y navegación hacen referencia a esta colección.

Dada la antigüedad de las Tablas Útiles al Navegante editadas por Fragata, su tipografía anticuada y la obsolescencia de algunas de sus tablas, hemos acometido una profunda revisión de las mismas, lo que ha dado lugar a una nueva colección más reducida. El nuevo conjunto, denominado Tablas del Navegante, cubre las necesidades del navegante actual que se vea privado de una calculadora y sirve para resolver los exámenes de las diferentes titulaciones como es el caso de Patrones y Capitanes de Yate.La Segunda Edición de esta colección incorpora nuevas tablas de «Distancias, velocidades y tiempos», «Conversión de tiempo en arco y viceversa» y en especial la Tabla 60 «Cálculo de la altura estimada de un astro y de la distancia ortodrómica»; con ellas se cubren en la práctica todos los cálculos que requiere el navegante.

A continuación se detallan las equivalencias más comunes entre las colecciones citadas. Las Tablas del Navegante tienen una numeración similar a las Tablas Útiles al Navegante a las que sustituyen. Las equivalencias son:

Denominación Tablas Nauticas Tablas Utiles al Navegante y Tablas del Navegante Tablas de Navegación
Depresión aparente y distancia al horizonte. XXIX2T.42 y T.53
Distancia al horizonte radar3
Corrección que debe aplicarse a las radiodemoras para convertirlas en demoras mercatorianas XLVIII7
Cálculo de la estima. VI (c) 10T.13.1 T.13.2
Latitudes aumentadas o partes meridionales. XLI 34T.21.1 T.21.2
Azimutes de los astros en el orto y ocaso verdaderos XXVI16, 16 bis y 17 T.60.1 T.60.2
Circunstancias favorables. Horario y altura del astro. XXVII 15T.62
Corrección de alturas de Sol por refracción y paralaje 19
Corrección de alturas de Sol.IX 20T.51
Corrección de alturas de Luna.X 21 y 22 T.54
Correcciones de alturas de estrellas y planetas. VII y VIII 23T.52
Refracción astronómica media. XIV 24T.50
Corrección.por temperatura . XIV (a) 25T.55
Corrección por presión atmosféricaXIV (b) 26T.55
Azimutes de los astros, Coeficiente Page y Rumbo inicial en la derrota ortodrómicaXVI 28, 28 bis y 28 terT.67.1 T.67.2 T.67.3
Latitud por circunmeridianaXVII y XVII (a) 43 y 44 T.65
Tiempo límite de las circunmeridianasXVIII 45T.65
Logaritmos de los números.I 49 y 50 T.71
Valores de senos y cosenos Valores de tangentes, cotagentes y cosecantes ... XXXV 53 y 54 T.72 T.73 T.74
Logaritmos de funciones trigonométricasII 55 y 56 T.70.1 T.70.2
Alturas termométricas (equivalencias) XIV (e) 57T.85.1 T.85.2 T.85.3


Aparte de las tablas citadas de uso general en la navegación, se han elaborada tablas para resolver el problema más complejo de la navegación astronómica, cual es el cálculo de la altura estimada en la observación de astros. Con excepción de la Tabla 60, de reciente elaboración e incorporada a la colección de Tablas del Navegante, estas tablas que reseñamos a continuación están ya descatalogadas o son de difícil adquisición :

Tablas Rápidas de Moreu Curbera y Martinez Jimenez
Tablas para la Navegación Astronómica de Fernandez de la Puente
Tablas de líneas de posición de altura de García-Frías
Tabla 60 para el cálculo de Altura estimada del Astro y Distancia Ortodrómica de Ignacio Barbudo
Sight Reduction Tables de la Hidrographic Office de Estados Unidos, las conocidas como tablas HO

Las cuatro primeras citadas calculan la altura del astro con una fórmula en función de la latitud, declinación y ángulo en el Polo, realizando el proceso en dos o tres pasos por medio de unas sumas intermedias.
Las tablas HO americanas calculan la fórmula pero sin cálculos intermedios; ello implica que son necesarias varias series de tablas para cada serie de latitudes, lo que se traduce en varios voluminosos y costosos libros.