De la Invencible a Guadalcanal

  • Alvaro Akerman
  • libro
  • tapa dura y sobrecubierta
  • 350
  • 30x22 cms
  • 84-921750-5-2
De la Invencible a Guadalcanal
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La tesis fundamental del libro es que, durante cerca de 4 siglos, el proyecto del buque de guerra ha dependido de manera casi total del cañón, como elemento de mayor influencia tecnológica, en un compromiso permanente entre la capacidad ofensiva que representa el cañón y la protección que ofrece la propia estructura del buque y posteriormente la coraza. Y siempre con el componente de la velocidad, para dar alcance al enemigo o para eludir el combate ante una fuerza superior.

No se trata de un libro exclusivamente técnico ni de historia naval, pero constituye un estudio riguroso, con aportación de miles de datos técnicos de buques de guerra, así como centenares de referencias históricas y cronológicas. Por su especialidad, es un trabajo dirigido a expertos: Marinos de Guerra, Navalistas, Ingenieros Navales. Pero al mismo tiempo está escrito con una gran amenidad, por lo que resulta atractivo incluso para un profano en estas materias.

El libro pretende ser una narración coherente y bien documentada de la lucha en el mar, abarcando un período de casi 400 años, que comienza en 1588 con la Armada mal llamada Invencible, cuya preparación, desarrollo y consecuencias se relatan detalladamente, y que constituye el primer gran encuentro naval en el que se hace uso exclusivo el cañón para el combate a distancia, en sustitución del abordaje y la lucha cuerpo a cuerpo, como se combatió sólo 17 años antes en Lepanto, la decisiva victoria naval contra el Turco, en el Mediterráneo y con galeras.

Se describen todas las batallas navales importantes ocurridas en esos 400 años, dedicando una especial atención al combate de Trafalgar, en el que la flota franco-española al mando del Almirante francés Villeneuve, fue derrotada por la del Almirante inglés Nelson, probablemente el mejor estratega naval de todos los tiempos. Y la batalla naval de Santiago de Cuba, la «splendid little war» de los americanos, en la que el Almirante Cervera tuvo que enfrentarse a una Escuadra Americana con una potencia de tiro seis veces superior a la española.

Se mencionan también en el libro importantes aportaciones españolas a la Construcción Naval y a la Navegación en este periodo de tiempo, como los avances en el diseño y construcción de buques de Jorge Juan, las iovaciones en el proyecto de submarinos de Narciso Monturiol y de Isaac Peral, la concepción del primer buque tipo destructor de Fernando Villaamil, el proyecto de cañones de gran calibre de González Hontoria, o la fragata Numancia, primer buque acorazado que dio la vuelta al Mundo, cuando se consideraba que un buque de este tipo no reunía condiciones marineras adecuadas para navegar en un Océano.

Se dan también las características técnicas de los buques de guerra más significativos de cada época, así como de su armamento.

Como más recientes, y probablemente más conocidas del lector, se presta una especial atención a la Primera y Segunda Guerras Mundiales, a las que se dedican tres capítulos.

El libro termina con la Batalla del Pacífico de la Segunda Guerra Mundial, en la que desaparece definitivamente el acorazado como buque capital en la guerra naval, para ser sustituido por el portaaviones. En el título del libro se ha elegido el nombre de Guadalcanal, como emblemático y representativo de la Segunda Guerra Mundial, al constituir este conjunto de batallas navales y en tierra el encuentro más largo, sangriento y decisivo de ella, y en el que de una manera, que había de ser definitiva, se impuso la supremacía naval norteamericana sobre el Japón, precisamente por su superioridad en portaaviones, después del desastre japonés en la Batalla de Midway.

Sin embargo, el último encuentro entre dos escuadras de acorazados tuvo lugar en la Batalla del Estrecho de Surigao en el archipiélago filipino, en octubre de 1944, dos años después de Guadalcanal, circunstancia probablemente sólo conocida por los expertos en temas navales.

Las ilustraciones constituyen una parte importante de la publicación, y se han recogido en el libro más de un centenar, muchas de ellas de buques históricos españoles, como más próximos y conocidos del lector.